Probablemente hayas oído las siglas de UX/UI en numerosas ocasiones, pero no sea un concepto que termines de tener claro. ¿Qué es realmente? ¿Qué puede aportar a mi producto? En CrossPoint trabajamos la experiencia de usuario en nuestros proyectos, siendo parte de nuestro proceso, lo cual marca la diferencia en la entrega de valor que hacemos a nuestros clientes. Por ello, esperamos que este artículo te ayude a entender mejor qué es la experiencia de usuario y por qué es importante.
¿Qué es UX/UI?
Empecemos por el principio. UX y UI son dos conceptos relacionados entre sí, pero diferentes.
UX son las siglas de User Experience. Es la disciplina que se encarga de cuidar y mejorar la experiencia que tiene el usuario cuando está en contacto con nuestros productos. No solo hace referencia al mundo digital, sino también el físico. Y cubre desde el cómo llega el usuario a nuestro producto hasta cómo se siente después de su uso.
UI son las siglas de User Interface. En este caso, hace referencia a los propios elementos con los que interactúa el usuario. Sus colores, tamaños, formas, funcionamiento y relación entre ellos.
Así pues, vemos que UX o UI no es "poner bonito" un producto, sino que va mucho más allá. Son dos conceptos que se complementan dentro del diseño de producto y que tienen un gran impacto en nuestros usuarios.
¿Qué valor aporta trabajar UX/UI en mis productos?
¿Has llegado a una página web donde te has bloqueado porque no sabías cómo navegar para encontrar la información que buscabas? Seguro que sí. Seguramente también has abandonado alguna web por el tiempo que tardaba en cargar o porque la web no se veía correctamente en el dispositivo que estabas usando. ¿Has empezado un proceso de compra y lo has abandonado porque no sabías cómo continuar, tenías que registrarte o te pedían más datos de los que consideras necesarios? Estos son algunos ejemplos de una mala experiencia de usuario.
El objetivo de UX es trabajar para que esta experiencia sea lo más satisfactoria y fluida posible. Conseguir guiar al usuario por el producto de manera fluida, sin generarle dudas para tomar acciones. De este modo, conseguiremos un mayor retorno y fidelidad a nuestra marca por parte de los usuarios.
Entendiendo el proceso de diseño
El diseño, como cualquier disciplina, tiene un proceso para conseguir un buen resultado. Son varias las metodologías que existen al respecto, y en CrossPoint apostamos por una de las más extendidas, Design Thinking, la cual define 6 fases, que se engloban en un flujo general de 3 fases iterativas:
1. ENTENDER
- Ten claro el objetivo del proyecto: Es importante no perder el foco del objetivo que buscamos, ya que cuando hay que tomar una decisión de diseño debemos optar por la que más nos ayude a conseguir el objetivo. ¿De dónde surge la necesidad?
- Conoce a tus usuarios: investiga sobre tus usuarios, qué necesitan, qué les motiva, qué desean, cuáles son sus conocimientos, cómo y cuándo se van a relacionar con tu producto. Todo lo que consigas reducir como una incertidumbre será una mayor probabilidad de éxito para el producto
- Identifica oportunidades de mejora: Con toda la información anterior organizada, observa dónde pueden existir los puntos de fricción de los usuarios, qué necesita el usuario. Con ello identificaremos dónde debemos poner el foco
2. EXPLORAR
- Creación de ideas: Es en esta fase donde generamos diferentes ideas para solventar los problemas que se han identificado en la fase anterior. La combinación de varias de ellas será la propuesta elegida.
- Construir un prototipo: esto nos ayudará a visualizar esa solución. Recabaremos feedback de diferentes compañeros, veremos qué elementos no funcionan, qué elementos pueden ser más complejos de construir.
3. MATERIALIZAR
- User testing: es importante que validemos con usuarios reales si nuestro producto cumple con sus necesidades y no crea ningún punto nuevo de fricción previamente a construirlo. De esta manera, conseguimos reducir los costes de desarrollo, ya que siempre es más fácil editar un prototipo que una funcionalidad real.
- Implementa la solución: Una vez que hayas iterado el diseño y hayas llegado a una solución factible, impleméntala. Pero le proceso no termina aquí, debes analizar el funcionamiento de la solución para identificar posibles mejoras y volver a iterar el proceso realizando así una mejora continua de tu producto.
Cómo trabajar UX/UI en soluciones Microsoft
Existe la creencia errónea de que los productos Microsoft pueden ser rígidos a la hora de mejorar la experiencia de nuestros usuarios. Nada más lejos de la realidad. Microsoft nos ofrece unas herramientas para ayudarnos a crear unos productos y además garantizar una buena experiencia. ¡Veamos algunos ejemplos de cómo hacerlo!
- Diseñar un buen flujo de usuario: tanto en una aplicación de Power Apps como en informes de Power BI nuestro usuario va a ir realizando unos pasos para navegar por él. Por eso es importante pensar y diseñar previamente este flujo. Debe ser claro e intuitivo para el usuario. Mostrándole en cada momento la información o posibles acciones sin sobrecargar las pantallas. Tener este flujo claro nos ayudará a poder desarrollar de manera más ágil y clara nuestros productos.
- Responsive: Es imprescindible saber cómo y dónde va a interactuar el usuario con nuestro producto. Pero hay veces que pueden ser varios dispositivos diferentes. No interactuamos igual con un ratón que con un móvil. Por ello, y cada día más, es imprescindible tener en cuenta el diseño móvil: tamaños de texto e imágenes, el tiempo de carga, la interacción de selectores, etc. La mayoría de productos que nos ofrece Microsoft son responsive. Es decir, se adaptan a los diferentes tamaños de dispositivos. En otros, nos permite definir el tamaño para el que estamos diseñando, asegurando así una correcta visualización en la pantalla del usuario.
- Aplicar nuestra guía de marca: todos los productos de Microsoft nos permiten en mayor o menor medida aplicar nuestra guía visual mediante temas. De esta manera, nuestro producto es reconocido como parte de nuestra marca.
- Mantener la consistencia: al trabajar mediante componentes nos aseguramos que se mantiene la consistencia en nuestro producto, ya que tendrán el mismo aspecto visual y el mismo comportamiento en todas sus instancias. Esto aporta confianza y seguridad al usuario, haciendo que su curva de aprendizaje sea mucho más pequeña.
- Accesibilidad e inclusividad: Suele ser el gran olvidado, pero es algo que puede afectar de muchas maneras a nuestros usuarios. Por ley, debemos cumplir con unas reglas de accesibilidad WCAG . No es algo que solo afecte a personas con discapacidad. Podemos tener usuarios con daltonismo (8% de los hombres, 1% de las mujeres) , que usen nuestro producto en un almacén con poca iluminación, o quizás nuestros usuarios son personas mayores que no tienen la agilidad para poder pulsar sobre elementos pequeños. Microsoft nos da productos que ya tienen en cuenta esto, y nos ofrece guías para los nuevos desarrollos que queramos hacer.
Esperamos que con este artículo te hayamos ayudado a tener una base de conocimiento más clara sobre qué es UX/UI, todo el valor que aporta en nuestros proyectos y cómo podemos trabajar UX/UI en soluciones Microsoft.
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